Ha sido un fin de semana inolvidable para nuestra hermandad. Presentación de María Santísima de la Merced, tras su restauración, en presencia de sus restauradores, D. Alejandro Manuel Clemente Morillo y D. Beltrán Castro-Palomino Hernández y el IV Pregón Joven a cargo de D. Francisco Javier Campos Navarro, que nos ofreció un texto cargado de simbolismos, de amor, de fe, de cariño, de bondad infinita. Destacamos y compartimos con vosotros esta pasaje del texto en el que Francisco Javier Campos Navarro dedica a su hermano Juan Antonio estas preciosas y emotivas palabras tras el desafortunado accidente sufrido por su hermano el pasado 28 de agosto: ...... Y grande es la bondad y la misericordia de nuestra Madre de la Merced. El 28 de agosto soltó el pañuelo de sus manos, se acercó a su Hijo y sin pensárselo dos veces rompió las cadenas que le amarraban a la columna. Los dos pusieron sus manos sobre las de los médicos que en esos momentos estaban atendiendo a un muchacho de 19 años en la UCI. Para mi obraron juntos un milagro, devolverle la vida a ese muchacho, devolverle la vida a mi hermano, devolverle a la vida a toda mi familia, a la que la desesperanza nos invadía en aquellos duros momentos. Cuando acabaron su trabajo, el Hijo volvió a amarrarse a la columna y la Madre volvió a coger el pañuelo para secarse las lágrimas entre sus manos. Al oído le dijeron: “Ya ha pasado lo peor. Descansa, duerme y que la paz te saluden al amanecer”. Y él se abrazó a la vida y venció al dolor y junto con tu ayuda, madre de la Merced, consiguió subir al pódium como un auténtico campeón. Hermano, no dejes que caigan tus sueños al suelo, que mientras más amas, más cerca está el cielo. Gracias de nuevo Madre de la Merced, sin duda, hoy es un día para celebrar el auténtico milagro de la vida. ....... FOTOS: Francisco Javier Campos González.
Posted on: Mon, 16 Sep 2013 08:33:02 +0000
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