Hola, qué tal?... Tal vez me recuerden por aventuras como - TopicsExpress



          

Hola, qué tal?... Tal vez me recuerden por aventuras como "manejé varias cuadras sin luces" o "se me para el auto a cada rato". Ultimamente no cuento mis aventuras, porque mucho no hay para relatar. La semana pasada usé un montón el auto, sobre todo porque estaba medio enferma y el frío polar y la gripe no eran una buena combinación para la bici. pero no pasó nada interesante. Me siento bastante más segura, con confianza, como si supiera. Me meto en estacionamientos sin sufrirlos tanto, adelanto a otros autos (siempre poniendo los giros correspondientes), etc. etc. Igual, cada vez que llego a un lugar, como que no lo puedo creer. Me parece mentira ser yo la que va en el asiento del lado izquierdo de adelante. No puedo creer abrir la ventanilla para sacar un ticket de estacionamiento y llegar sin tener que bajarme. Me siento como si fuera grande. Pensaba que esto de ser una P al volante me hacía escribir sobre las cosas que me suceden con el auto, por primera vez. Así que hoy, por más tonto que sea, algo pasó. Bueno, lo de hoy fue una verdadera boludez, pero por primera vez alguien, de auto a auto, me preguntó sobre una calle!! Sí, les dije, ni siquiera sé si vale la pena contarlo. Pero bueno, sino no tengo qué escribir. La cosa fue así: venía por Av. Córdoba, obviamente había bastante tránsito (siempre hay mucho tránsito, creo que hasta de madrugada). Estaba puteando con muchas ganas a un boludo que me hacía luces porque yo me había frenado. ¿Por qué me había frenado?? Porque si empezaba a cruzar, era probable que me cortara el semáforo y yo quedara en mitad de la bocacalle, porque el de adelante no avanzaba. Yo cumplo con las normas, el forro de atrás no. Lo puteaba como lo hago siempre, sin que nadie me escuche, con la ventanilla cerrada. Putée con ganas, con muchas malas palabras, con voz fuerte, como lo haría la Gata Varela (no sé, me gustó pensar que puedo putear como ella, ya que cantar no). Una puteada larga, ocurrente. Cuando sigo andando, un par de cuadras después, en un semáforo, me hace señas un muchacho de una combi (o traffic, o camionetita... la verdad es que no las distingo) que estaba por la derecha. Señas de que bajara el vidrio. Debo confesar que con esta paranoia generalizada, tuve un pequeño momento de duda. ¿Tengo que bajar la ventanilla? ¿Me van a robar? ¿Me quieren matar?. Pero lo hice. Me pregunta sobre una avenida. Yo sabía dónde quedaba (cosa rara en mi). Le digo: mirá, seguí derecho, deben ser unas 4 o 5 cuadras. Me agradece, y se va. Sí, eso fue todo. No me pidió el teléfono. No me dijo: te hice señas porque me deslumbraste, o me alucinó lo bien que manejás. No, sólo me preguntó una calle. Yo no hice mucho, sólo lo ayudé. Pero de nuevo, me sentí grande. Contenta. Sí, ya sé, era más divertido cuando contaba que no podía estacionar o que no me animaba a bajar en algún lado, pero por suerte eso va mejorando! Igual tranquilos (bue, como si hubiera gente agolpada esperando por mis anécdotas), todavía no puedo andar en autopistas ni rutas, así que cuando ese momento llegue, y pueda hacerlo, lo van a saber por acá. Ahí creo que va a haber bastante material!!
Posted on: Thu, 29 Aug 2013 01:56:05 +0000

Trending Topics



520460846">The Bible does not give the date of Jesus’ birth, nor does it
I know summer has passed in my corner of the world, but it is

Recently Viewed Topics




© 2015