Me escribe mi amigo Arturo Del Villar Populares de mierda, no se merecen gobernar SE equivoca el camarada García, ministro de Asuntos Exteriores en el Gobierno del partido que se dice Popular, si cree que esa idiotez de la Marca España que se ha inventado va a dejar de estar gafada por cesar al suprecretino Juan Carlos Gafo en su cargo de adjunto al alto comisionado. El partido tiene que rellenar los altos cargos funcionariales con sus militantes, y como no hay mucho para elegir, pone hasta al tonto del pueblo para alcalde si tiene carné de militante. A fin de cuentas, si Mariano Rajoy es presidente del Gobierno, es claro que hasta el más idiota puede hacer carrera en el reino de España. A Gafo se le ocurrió escribir el 19 de julio en Twitter: “Catalanes de mierda, no se merecen nada.” Y no añadió que para eso se habían sublevado los suyos hacía 77 años porque no le cabía, pero seguro que lo pensaba. Para eso entró el exgeneral Yagüe el 26 de enero de 1939 en Barcelona, al frente de una banda de criminales de guerra, después de haberla bombardeado sin piedad. Obedeció la gafada a que aquel día los derrotados pero no vencidos barceloneses pitaron la interpretación de la Marcha real, durante la solemne inauguración del XV Campeonato Mundial de Natación, en el Palau Sant Jordi, presidida por Artur Mas, en su puesto como presidente de la Generalitat de Catalunya. Debía haberlo hecho el tripríncipe de Asturias, Girona y Viana, que es muy aficionado a todos los deportes, y hasta fue campeón olímpico en el de llevar una bandera con mucho garbo, pero no se atrevió a asistir, para ahorrarse la pitada con la que es recibida siempre la familia irreal en sus apariciones públicas. Por eso, a falta de tripríncipe se pitó al himno de su familia. ¿Y por qué se llama Marcha real si no se marchan? ¡Que se marchen! Todavía le sonarán en las orejas los abucheos, pitidos e insultos con que fueron acompañados el pasado 30 de mayo él y esa impresentable mujer con la que se ha casado, cuando se dirigían por la Rambla al Gran Teatre del Liceu. Manifestaciones de rechazo multiplicadas al entrar en el palco y durante la representación, por lo que no se atrevieron a acudir al Saló dels Miralls en el entreacto, como es tradicional. “Foten el camp”, gritaban los espectadores del Liceu, el primer centro cultural barcelonés, al que pertenece la alta burguesía culta de la ciudad. Por no citar más que una pitada reciente y en Barcelona, porque para recogerlas todas hace falta un libro muy grueso. En Catalunya no se acata que sea príncipe de Girona por voluntad de su padre, como no se aceptaba que su abuelo se hubiera autoproclamado conde de Barcelona. Es que Catalunya no es suya, y España tampoco, que no se la apropien repartiéndosela en títulos nobiliarios. El día 10 de diciembre de 2012 Girona se declaró territorio catalán libre y soberano, a pesar de lo cual él sigue utilizando el título de príncipe, porque para eso es teniente coronel de los ejércitos de Tierra y Aire, y capitán de fragata de la Armada, así que a ver quién se atreve a discutirle el gusto y el mando. Tiene derecho a entrar en Catalunya como Yagüe en su día, que no en balde su papá es el heredero del dictadorísimo que ganó la guerra, y manda sobre unas fuerzas policiacas muy contundentes. La Marcha real no es el himno nacional de España, sino el de los borbones. Por eso no lo reconocemos una gran parte de españoles. Nuestro himno nacional es el Himno de Riego, el que cantaban las tropas del valeroso general que hizo jurar la Constitución de Cádiz al indeseable Fernando VII, alias Narizotas, que por sus napias se les conoce. La juró y después la perjuró, como buen Borbón, y además hizo asesinar al general Riego, uno más en su lista de crímenes. Lo llevan en los genes. Yo no soy catalán, y pito a la Marcha real igual que abucheo a la familia irreal siempre que se me presenta la oportunidad de hacerlo. Supongo que para el gafe Gafo yo seré un español de mierda. Pues a mucha honra, que los descalificativos de los fascistas son un honor para el que los recibe Una mafia incontrolada Pero los que tienen demostrado ser unos españoles de mierda son los cargos públicos del partido que se dice Popular. Los españoles nos sentimos avergonzados de que estén gobernando estos llamados populares, que no son un partido político, sino una mafia. Es vergonzoso saber que su tesorero, Luis Bárcenas, está en la cárcel por haber acumulado una fortuna personal de unos cuarenta millones de euros, que se sepa, conseguidos con los porcentajes que se quedaba de las propinas facilitadas al partido por empresarios necesitados de conseguir contratos con las diversas administraciones públicas. Ahora cuentan sus compañeros de militancia que es un grandísimo ladrón corrupto, y tienen razón, pero no decían lo mismo cuando les entregaba en secreto sobres bien abultados. Ellos son igual de corruptos. Al verse en la cárcel, a Bárcenas se le ha despertado la memoria, y ha empezado a acusar a sus antiguos compañeros de partida y de partido. Desde el presidente del Gobierno hasta el último concejal del municipio más pequeño, todos se han beneficiado del llamado dinero negro, aunque no procede de las minas de carbón por un trabajo honrado, sino que está obtenido con métodos mafiosos. Somos, como siempre, la vergüenza del mundo. El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, manifestó públicamente el 20 de julio su desprecio por el Gobierno de España, empezando por su presidente. Y ha denunciado su intromisión en la política interna de la República soberana para intentar un golpe de Estado ultraderechista contra el Gobierno legítimo y el presidente elegido por el pueblo libremente, no como el rey de España, que fue designado por el dictadorísimo genocida, y su hijo, que aspira a sucederle en el trono por una decisión espermatozoica. Nos los merecemos El llamado Partido Popular fue fundado por el fascistísimo Manuel Fraga, fiel servidos del dictadorísimo golpista. Sus hijos políticos son de su misma calaña. Populares de mierda, no se merecen gobernar. Pero a ver quién los remueve. El otro partido dinástico con el que se alternan en el poder, el Pseudo Socialista Obrero Español, tiene un pasado igualmente corrupto, de cuando presidía el Gobierno X González, el de los escándalos financieros y criminales, y un presente judicializado en Andalucía por apropiarse el dinero de los desempleados. Al pueblo le dan fútbol todos los días. El rey podría hacerlo si contase con autoridad moral para ello, cosa imposible debido a sus propios escándalos de toda clase, incluidas cuentas en Suiza y una fortuna personal de unos 1.800 millones de euros, según cálculos de la revista Forbes, más las barraganas entrañables. Así que hemos de pensar que tenemos lo que nos merecemos. ARTURO DEL VILLAR PRESIDENTE DEL COLECTIVO REPUBLICANO TERCER MILENIO
Posted on: Mon, 22 Jul 2013 07:52:03 +0000