Para parar un tren Edición impresa de La Vanguardia. Opinión | - TopicsExpress



          

Para parar un tren Edición impresa de La Vanguardia. Opinión | 30/07/2013 Miguel Ángel Aguilar Cuando se habla de cantidades ingentes se utiliza el modismo como para parar un tren. Sucede que el tren Alvia entró en la curva de A Grandeira situada a cuatro kilómetros de la estación de Santiago de Compostela a la velocidad de 190 kilómetros por hora, cuando el límite máximo marcado a partir de ahí era de 80. Una sencilla regla de tres permite averiguar que el tren, a la velocidad que llevaba, hubiera tardado en recorrer los cuatro kilómetros 75 segundos y 78 centésimas. Y sabemos que la distancia entre dos puntos se mide tanto en metros del recorrido como en tiempo cronológico invertido en recorrerlos. Los avisos de la megafonía del tren van con anticipación de modo que antes de llegar a esa curva es seguro que ya había sonado la advertencia de la próxima parada, que también hubo de oír el maquinista. Además el frenado, operación inversa a la aceleración, en ese lapso de 4 kilómetros habría debido reducir a cero la velocidad del tren desde los 190 kilómetros por hora. Sabemos que para una aceleración o frenada constante el espacio recorrido por un móvil resulta ser E = ½ a·t2 y de donde el valor de la aceleración negativa a = 1,42 metros/segundo cada segundo. La fuerza a aplicar para lograrla es igual al producto de esa desaceleración por la masa del tren (tara más pasaje). La composición estándar del Alvia tiene un peso de 361 toneladas métricas, el pasaje lo componían 218 viajeros y 4 tripulantes, es decir 222. Si se supone un peso medio de 60 kg y se añade un equipaje de 3 kg de promedio se obtiene aproximadamente una masa de 375.000 kilogramos. La mecánica clásica indica que la fuerza es igual a la masa por la aceleración, y así la fuerza requerida para detener el tren en Santiago sería de 532.500 newtons. Nos falta saber cuál es la fuerza de frenado de que dispone el Alvia. En cada comunidad autónoma quieren el AVE y no se conforman con la velocidad alta bajo distintas especificaciones y sistemas de control. Esperemos la caja negra pero sepamos que los compromisos políticos a veces se avienen mal con las exigencias técnicas. Y habrá que explicar por qué el AVE a Alicante se ha inaugurado sin los sistemas ERTMS y circula con señales como las que han permitido el fallo que lamentamos.
Posted on: Tue, 30 Jul 2013 18:49:51 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015